Himalaya 7000
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abr 01
Despacho #6
Publicado a las 03:14
Hola a todos, ya estamos en el Himalaya!!
Ayer fue un día fantástico. Tras una larga espera en el aeropuerto,
finalnente abordamos un pequeño avión que poco a poco nos sacó de la
espesa bruma que envuelve la ciudad de Katmandú para comenzar a ver
por fin las majestuosas montañas. Tras un corto vuelo, aterrizamos en
la corta y empinada pista de Lukla. Un hermoso pueblito Sherpa
enclavado en la parte baja del Valle del Solokumbú. Es un lugar
facinante, a siete días a pie del camino vehícular más cercano,
rodeado de montañas y rododendros en flor, los que junto a las
terrazas sembradas de trigo, los techos azules y muchas otras flores,
hacen de este colorido pueblito un lugar realmente hermoso.
Tras cálculos y una larga reflexión, decidimos contar con la ayuda de
dos porteadores Sherpa, para recorrer los seis días que nos separan
del último villorio, llamado Khare y un par de kilómetros más hasta el
Mera La (La significa portezuelo) lo que para nosotros será la puerta
al valle de Honggu y a las montañas despobladas como las conocemos en
nuestros queridos Andes.
De este modo conocimos a Karma Sherpa, simpático, sencillo y muy
acogedor, nos invitó a conocer su casa a unos kilómetros de Lukla y a
su esposa Sabina, que sería la cuarta integrante del equipo hasta el
Mera La.
El recorrido a su casa fue suficiente para maravillarnos con la forma
de vida de este pueblo agrícultor, que en cada rincón que las montañas
lo permiten, construyen terrazas que siembran con trigo y papa. Todo
lo cargan con la cabeza, en particular de un lado a otro llevan el
pasto y las hojas para alimentar a sus animales (gallianas, vacas,
yaks y una mezcla entre vaca y yak llamada ...), llama mucho la
atención de que no parecen mostrar el más mínmo interés en usar motos,
caballos o mulas, ellos simplemente caminan, incluso las cargas las
suelen mover a pie.
El calendario del restorancito donde nos comimos un buen bistec de Yac
marcaba el año 2167, y el año comenzaba el 14 de febrero, también
supimos que no celebran los cumpleaños y fácilmente pierden la cuenta,
de hecho Sabina no supo decirnos que edad tenía, parece no ser
importante. Dijo: "habría que preguntarle a mi padre".
Hoy estamos cerrando algunos tramites y postulaciones que nos forzaban
a esperar el primero de abril en un lugar con internet, y a las 10:00
h partiremos con Karma y Sabina a nuestro primer destino: Chutanga.
Abrazos a todos
Natalia y Camilo
Ayer fue un día fantástico. Tras una larga espera en el aeropuerto,
finalnente abordamos un pequeño avión que poco a poco nos sacó de la
espesa bruma que envuelve la ciudad de Katmandú para comenzar a ver
por fin las majestuosas montañas. Tras un corto vuelo, aterrizamos en
la corta y empinada pista de Lukla. Un hermoso pueblito Sherpa
enclavado en la parte baja del Valle del Solokumbú. Es un lugar
facinante, a siete días a pie del camino vehícular más cercano,
rodeado de montañas y rododendros en flor, los que junto a las
terrazas sembradas de trigo, los techos azules y muchas otras flores,
hacen de este colorido pueblito un lugar realmente hermoso.
Tras cálculos y una larga reflexión, decidimos contar con la ayuda de
dos porteadores Sherpa, para recorrer los seis días que nos separan
del último villorio, llamado Khare y un par de kilómetros más hasta el
Mera La (La significa portezuelo) lo que para nosotros será la puerta
al valle de Honggu y a las montañas despobladas como las conocemos en
nuestros queridos Andes.
De este modo conocimos a Karma Sherpa, simpático, sencillo y muy
acogedor, nos invitó a conocer su casa a unos kilómetros de Lukla y a
su esposa Sabina, que sería la cuarta integrante del equipo hasta el
Mera La.
El recorrido a su casa fue suficiente para maravillarnos con la forma
de vida de este pueblo agrícultor, que en cada rincón que las montañas
lo permiten, construyen terrazas que siembran con trigo y papa. Todo
lo cargan con la cabeza, en particular de un lado a otro llevan el
pasto y las hojas para alimentar a sus animales (gallianas, vacas,
yaks y una mezcla entre vaca y yak llamada ...), llama mucho la
atención de que no parecen mostrar el más mínmo interés en usar motos,
caballos o mulas, ellos simplemente caminan, incluso las cargas las
suelen mover a pie.
El calendario del restorancito donde nos comimos un buen bistec de Yac
marcaba el año 2167, y el año comenzaba el 14 de febrero, también
supimos que no celebran los cumpleaños y fácilmente pierden la cuenta,
de hecho Sabina no supo decirnos que edad tenía, parece no ser
importante. Dijo: "habría que preguntarle a mi padre".
Hoy estamos cerrando algunos tramites y postulaciones que nos forzaban
a esperar el primero de abril en un lugar con internet, y a las 10:00
h partiremos con Karma y Sabina a nuestro primer destino: Chutanga.
Abrazos a todos
Natalia y Camilo
- Nombre: Lukla
- Elevación: +2860 m
- Latitud: 27° 41’ 17” Norte
- Longitud: 86° 43’ 54” Este
Felices al fin rumbo al Himalaya, Lukla
Uno de los tantos arboles en flor
Camilo orando a lo Sherpa
La acogedora casa de Karma y Sabina
La flor del rododendro.
Nati contemplando el pueblo desde una Gumpba (monasterio) cercano.
Una Gumpba encaramada en las paredes de roca.
Terrazas con trigo y papa
El pueblo y sus pequenas espigas de trigo.
Un popular juego local, algo parecido al pool
Nati, yaks y baquitas por las calles de Lukla
Rododendros en flor
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